Con la situación que estamos viviendo, es normal que te sientas cansado, enfadado y desmotivado. No puedes quedar con todos tus amigos y te han cancelado los entrenamientos y partidos de tu deporte favorito. Si te resulta aburrido pasear o hacer ejercicio a solas, una alternativa es practicar ejercicio junto a tu perro, si lo tienes. Son muchas las actividades que podéis realizar juntos: una caminata por el parque, apuntaros a alguna carrera, subir o bajar escaleras o jugar a la pelota o al disco. Los perros son felices si realizan actividades con sus dueños. Y, además, el ejercicio en su justa medida es beneficioso tanto para ellos como para los humanos. Esta semana, en El Periódico del Estudiante, hablamos con Fernando Lebrero, voluntario de la protectora Zarpa y especialista en deporte canino, que nos da tres ideas para ponernos en forma junto a nuestras mascotas: salir a correr o en bici, los circuitos de obstáculos y la detección deportiva.
Mushing: de la nieve al asfalto
Las carreras de trineos con perros o mushing tan populares en los países nórdicos se han ido adaptando con el tiempo a los distintos climas. Hoy en día también se llama mushing a correr o ir en bici junto a tu mascota, usando su fuerza para ayudarte a correr más distancia o más rápido. «Es muy fácil empezar a practicarlo, porque a todos los perros les encanta correr. Para ello se necesita un arnés (nunca un collar), preferiblemente acolchado, que une al perro con nuestro cuerpo mediante una línea o correa atada a nuestra cintura con un cinturón o directamente a la bici», cuenta Lebrero.
La intensidad del ejercicio depende del tipo de perro y de su edad. «Hay que ir poco a poco, no se puede llegar el primer día y correr 20 kilómetros», continúa el experto. «La temperatura también es importante porque los perros no sudan como nosotros, lo hacen a través de la boca, y a partir de 16 grados no se recomienda hacer grandes carreras». También se deben evitar zonas de asfalto y optar por parques o caminos de tierra. Según Lebrero, cualquier perro puede hacerlo, aunque «muchas veces corren lo que les pedimos, así que tenemos que ser su límite y su cabeza».
Otra alternativa para hacer ejercicio con nuestra mascota es el agility o los circuitos de obstáculos. En este caso, durante los paseos puedes enseñar a tu perro a saltar algún banco, pasar por debajo de alguna valla, subir y bajar escaleras o hacer un slalom con conos. «Podemos utilizar el mobiliario urbano o el que tenemos en el parque para hacer distintas actividades y circuitos», sugiere el miembro de Zarpa. En Zaragoza hay espacios gratuitos habilitados en varios parques, como el Parque del Agua, para poder practicar esta modalidad de deporte canino. «En principio se puede realizar con cualquier perro, aunque siempre van a ser mejores unos que otros por su interés y su genética», dice el especialista. Lo bueno del agility es la facilidad para encontrar obstáculos en la calle. «No se necesita ningún equipamiento especial, basta con una correa», apunta.
Olfatear cansa
¿Sabíais que 10 minutos de olfateo para un perro equivalen a una hora de ejercicio físico? Por eso la detección de sustancias específicas por parte de los canes está considerada un deporte. Según Lebrero, podemos empezar a practicar la detección deportiva en casa, escondiendo chucherías o juguetes y enseñando a nuestro perro a buscarlos. «Empezamos poniéndoselo fácil para que entienda el juego y lo vamos complicando más», aconseja.
Otra opción es esparcir chucherías por el suelo en un cuarto oscuro o esconderlas en el parque, por el césped o a distintas alturas, para que el perro olfatee por todas las zonas. «En internet hay un montón de juegos de olfato con material casero como botellas, hueveras o rollos de papel higiénico. Incluso el clásico trilero. Lo bueno del olfato es que los cansa mucho, gastan mucha energía mental y eso les relaja», asegura el voluntario de la protectora de animales.
Finalmente, tal y como recuerda Lebrero, en cualquier de estos tres deportes «siempre se debe premiar al perro de forma positiva para motivarles a volver a hacerlo». Además, «ajustaremos el tipo de ejercicio y la intensidad a la forma física tanto del animal como la nuestra, empezando con algo sencillo, que sea fácil de entender para ellos». «Practicar deporte con tu mascota refuerza el vínculo y la amistad que se tiene con ella. A los perros les hace también más seguros de sí mismos y les ayuda a superar miedos. Cualquier actividad que hagamos, si se hace bien, va a servir para divertirnos y quitarnos estrés. Lo fundamental es que los dos disfrutemos», concluye el especialista.