En un devastador episodio de violencia armada, un tiroteo en Maine (Estados Unidos), dejó un saldo de al menos 22 personas muertas y 13 heridas. El ataque tuvo lugar la noche del miércoles en dos ubicaciones diferentes: una bolera donde se llevaba a cabo un torneo infantil y un restaurante cercano.
El sospechoso, identificado como Robert Card, un militar en la reserva de 40 años y instructor de tiro, está actualmente prófugo y es considerado extremadamente peligroso. Las autoridades han instado a los residentes de varias localidades, incluyendo Lewiston y áreas circundantes, a permanecer en sus hogares hasta nuevo aviso.
El atacante sigue a la fuga
A día de hoy, el autor de los disparos sigue en libertad más de 24 horas después del trágico suceso. Se ha identificado como un instructor certificado en el manejo de armas de fuego y un miembro activo de la reserva de la armada de Estados Unidos. Además, cuenta con experiencia como instructor de armas de fuego, aunque se le atribuyen antecedentes de problemas de salud mental.
Según informa el periódico The New York Times, se ha desplegado un operativo policial en la residencia de la familia del sospechoso, ubicada en la localidad de Bowdoin. Se reportaron cuatro ruidos fuertes, los cuales no parecían ser disparos, según testigos en la escena. La cuñada del sospechoso declaró al medio que su familia está colaborando con las autoridades para llevar a cabo un registro exhaustivo de todas las propiedades en la residencia familiar. Como parte de este procedimiento, los agentes han procedido a cerrar el acceso a la carretera.
Robert J. Louden, exjefe negociador de rehenes del Departamento de Policía de Nueva York, ha compartido que existen cuatro escenarios posibles desde el punto donde abandonó su vehículo en el estacionamiento. Puede haber optado por quitarse la vida, abordar una embarcación y escapar a través del río cercano, partir en otro vehículo o motocicleta previamente preparada, o bien, seguir una ruta de senderismo, lo que lo ubicaría en algún punto del bosque.
El papel de las autoridades en la tragedia
La gobernadora de Maine, Janet Mills, expresó su pesar por la tragedia y señaló que este acto de violencia impacta la reputación de Maine como uno de los estados más seguros en la Unión. La mandataria también informó que ha mantenido conversaciones con el presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris sobre la situación.
El presidente Biden emitió un comunicado lamentando el tiroteo y renovando su llamado a la prohibición de armas de asalto. Subrayó la necesidad de acciones concretas para abordar la violencia armada y proteger a la población.
Este trágico incidente marca el tiroteo masivo número 565 en lo que va del año en Estados Unidos, siendo el más mortífero hasta la fecha. Según el Gun Violence Archive, un tiroteo masivo requiere al menos cuatro víctimas mortales o heridas por bala, excluyendo al agresor, y las víctimas no pueden ser miembros de la misma familia. Estos números revelan una escalofriante estadística de casi dos tiroteos masivos por día en 2023.
Con al menos 22 víctimas mortales, el tiroteo en Maine se ubica como el décimo evento de este tipo con más muertes en la historia de Estados Unidos. Las autoridades están desplegando todos los recursos disponibles para localizar y detener al sospechoso, quien se cree podría estar intentando escapar hacia Canadá.
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Preguntas frecuentes sobre el tiroteo en Maine
¿Qué sucedió en el tiroteo en Maine?
El tiroteo en Maine ocurrió en la ciudad de Lewiston, donde un individuo armado abrió fuego en una bolera y un restaurante, dejando un saldo de al menos 22 muertos y 13 heridos.
¿Quién es el autor del tiroteo?
El autor del tiroteo ha sido identificado como Robert Card, un instructor de manejo de armas de fuego con certificación, además de ser miembro de la reserva de la armada de Estados Unidos. También se sabe que tiene antecedentes de problemas de salud mental.
¿Dónde se encuentra actualmente el sospechoso?
Hasta el momento, el sospechoso se encuentra prófugo y las autoridades tienen la preocupación de que pueda estar intentando fugarse hacia Canadá.
