Es el cáncer más común, pero no por eso da más miedo. El cáncer de mama es la forma de cáncer más diagnosticada por las autoridades sanitarias, y los científicos han desarrollado una vacuna que puede acabar con él. Ya está en la fase 2.
Una vacuna contra el cáncer de mama que ha estado en desarrollo durante más de una década se encuentra en fase 1 de ensayos en humanos. Se descubrió que el nuevo tratamiento es seguro y que actualmente se está realizando un ensayo de fase 2 para probar su eficacia.
Hasta el 30 por ciento de los pacientes con cáncer de mama producen un exceso de proteína (HER2). Durante las últimas dos décadas, uno de los tratamientos clínicos más eficaces para este tipo de cáncer de mama ha sido la terapia con anticuerpos monoclonales diseñada para bloquear la actividad de HER2 en las células tumorales.
Sin embargo, los científicos han estado trabajando durante mucho tiempo en vacunas que podrían entrenar al sistema inmunitario para atacar estas células tumorales positivas para HER2. Estos tipos de vacunas contra el cáncer no se concibieron originalmente como vacunas preventivas contra el desarrollo del cáncer. Sino que eran vacunas terapéuticas.
Una vacuna que no previene, sino que cura
En este caso, los investigadores están trabajando en las llamadas vacunas de ADN. Estas vacunas introducen los planos de ADN para la producción de ciertas proteínas en el núcleo celular. Esta proteína es producida por las células y provoca una respuesta inmune.
La primera fase del ensayo comenzó hace 20 años, reclutando lentamente a 66 pacientes con cáncer de mama avanzado para HER2-positivo. Se probaron tres niveles de dosis diferentes y la finalidad principal del ensayo era evaluar la seguridad en el tiempo de la vacuna.
Debido a que la proteína HER2 se puede encontrar en otros tipos de células del cuerpo, los investigadores plantearon seguir a cada participante durante 10 años para asegurarse de que no hubiera problemas permanentes con la función inmunológica en el tejido sano.
El equipo notó que los primeros signos de efectividad eran prometedores, un 80 por ciento de los participantes del estudio que recibieron el tratamiento, sobrevivieron a los 10 años de seguimiento. Ahora, se están realizando ensayos de fase 2 para probar la eficacia de la vacuna en muestras más grandes. Los días del cáncer de mama están contados.