Las autoridades de Zimbabue han achacado este martes a una «infección bacteriana» la muerte de más de 25 elefantes cerca del mayor parque nacional del país, una vez concluidas las investigaciones en torno al deceso de estos animales.
«Hasta ahora, las pruebas de laboratorio han revelado lo que se llama Pasteurella multocida tipo B, que causa la enfermedad de la septicemia hemorrágica, es lo que ha provocado la muerte de nuestros elefantes», ha dicho el portavoz de la Autoridad de Gestión de Parques y Fauna de Zimbabue (Zimparks), Tinashe Farawo.
«Hemos enviado pruebas a Sudáfrica y Reino Unido para nuevas pruebas», ha manifestado, en una entrevista concedida a la agencia alemana de noticias DPA. Los elefantes muertos fueron localizados en agosto en el bosque de Pandamasue, entre el Parque Nacional Hwange y las cataratas Victoria, cerca de la frontera con Botsuana.
El propio Farawo anunció el lunes el hallazgo de otros dos elefantes muertos el 25 de septiembre en el área de las cataratas Victoria, lo que eleva a 27 los animales muertos durante los últimos dos meses. «Sospechamos de una infección bacteriana», añadió.
Las autoridades de Botsuana señalaron la semana pasada que una bacteria transmitida por el agua ha provocado la muerte de 330 elefantes en el Delta del Okavango durante los últimos meses, tras semanas de incertidumbre respecto a la causa de la muerte de los animales.
El análisis de datos recogidos, entre otros, de los cadáveres, el suelo, la sangre y muestras de las acumulaciones estacionales de agua de las que bebían los paquidermos ha permitido «detectar y diagnosticar las cianobacterias», según manifestó el veterinario del Departamento de Vida Silvestre y Parques Nacionales, Mamadi Reuben.
Tanto Zimbabue como Botsuana son conocidos por su naturaleza y son un destino turístico popular debido a su vida salvaje. Zimbabue cuenta con una de las mayores poblaciones de elefantes del mundo y en el Parque Nacional Hwange residen 45.000 de estos animales.